MEDELLÍN, OTRO SALTO ADELANTE

Nota editorial de ElColombiano

El 30 de abril de 2019 se inaugura en Medellín el Centro para la Cuarta Revolución Industrial (C4IR), que funcionará en Ruta N, y cuya sede fue formalizada el pasado mes de enero en Davos (Suiza), durante las sesiones del Foro Económico Mundial. Es el primero en América Latina y la idea es que desde acá se proyecten sus ideas, programas e innovaciones al resto de países.

De la red de C4IR hacen parte ya Tokio, San Francisco, Mumbai y Beijing. Con Medellín entrarán también ciudades de Israel, Sudáfrica, Emiratos Árabes Unidos y Noruega. Nuestra ciudad ofreció no solo el compromiso de asumir el reto de continuar y potenciar todo el ecosistema de investigación y desarrollo en las áreas propias de la 4RI, sino los datos de ser una ciudad que invierte en políticas de ciencia, tecnología e innovación (2,14 % del PIB el año anterior). Así, por lo menos, lo presentaron los estudios de la Alcaldía, que recibieron la confianza del Foro Económico Mundial, con la buena fortuna de contar con el respaldo y compromiso del Banco Interamericano de Desarrollo, del presidente Iván Duque y del ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, quienes estarán hoy en la inauguración del C4IR.

Ruta N tiene previsto que para el año 2021 el 3 % de la economía de Medellín se destine a actividades de ciencia y tecnología mediante alianzas conformadas por todos los sectores de la economía, y que el 70 % de la inversión en ciencia y tecnología provenga del sector privado. Esta misma entidad resume los objetivos del C4RI en Medellín en tres ejes: 1) Incrementar el uso de la Inteligencia Artificial por parte del Estado para combatir el lavado de activos, mejorar el recaudo de impuestos o reducir el contrabando, entre otros. 2) Habilitar la creación de empleos de calidad alrededor del uso de las tecnologías para mejorar la movilidad de la ciudad. 3) Mantener el balance entre la privacidad y la utilización productiva de datos personales.

Cada uno de esos capítulos abre un enorme abanico de posibilidades en creación de industrias de tecnología e innovación, y de creación de empleos calificados en su entorno. El ministro de Comercio, Industria y Turismo, por su parte, ha mencionado el énfasis en uno de los componentes de la 4RI, el Internet de las cosas, y el alcalde Federico Gutiérrez en el manejo de las tecnologías 4.0 en la implementación de políticas regulatorias, uno de los mayores retos a cargo del Estado, en cuanto casi todas estas innovaciones van a tal velocidad que la capacidad regulatoria estatal se encuentra en blanco.

Aparte de las oportunidades ya mencionadas para Medellín, están, por supuesto, los compromisos y retos. El mayor, iniciar y fortalecer las políticas educativas y de formación en tecnología. De hecho, los componentes de la 4RI (Internet de las cosas, blockchain, minería de datos, entre otros) así como la terminología especializada pueden parecer por completo extraños e inalcanzables para buena parte de la población. La labor pedagógica habrá de ser, al igual que todos los planes que se ponen en marcha hoy, inteligente e innovadora.

Es un nuevo hito para la ciudad, que encontrará cabal ajuste con los nuevos rumbos que quiere la sociedad, en cuanto tenga continuidad en las siguientes administraciones municipales, y en cuanto se constituya en núcleo que irradie a todo el país y al resto del continente, modelo impulsor de una nueva economía a tono con el espíritu de innovación por el que se ha apostado en los últimos años.